Entre el verde profundo de la Sierra Blanca y la claridad persistente del cielo de Marbella, el estudio Fuertes Santamarta ha diseñado una vivienda que respira calma y elegancia. La casa, ubicada en la exclusiva urbanización Altos Reales, es más que un ejercicio de interiorismo: es un elogio a la luz, a la vida compartida, al confort esencial.
La intervención de las interioristas Alicia Fuertes y Sara Santamarta se desarrolla a partir de una lectura precisa del lugar, con el uso de materiales nobles, y un diseño a la medida de la forma de habitar de sus propietarios: una pareja joven y moderna.
Un corazón fluido y sereno
La planta principal de la vivienda es, sin duda, su alma visible. Salón, comedor y cocina se funden en un único espacio noble, presidido por una chimenea central de ladrillo blanco roto dispuesta en espiga, sin juntas. A ambos lados, librerías de madera lacada, con objetos decorativos e iluminación superior, enriquecen la perspectiva y dan calidez a la estancia.
Cada pieza ha sido pensada y diseñada a medida: mesas geométricas con tablones seleccionados por los propietarios, tapicerías en lino y algodón, doble alfombra —una base de yute natural y una pieza vintage en tonos rojizos y verdes—, madera sin artificios, hierro tratado con delicadeza. Todo habla de una estética contenida, natural, sin alardes, pero profundamente rica en matices.



La cocina se abre al comedor como una continuidad natural. Lacada en el mismo tono de la chimenea, incorpora detalles en cobre —grifería, fregadero, tiradores— que aportan una nota de sofisticación templada. Una gran mesa de roble negro mate para diez comensales, iluminada por lámparas tipo cesta con vidrio mercurizado, preside el conjunto.
La intervención clave fue pequeña, pero decisiva: eliminar parte del cerramiento del porche permitió ganar metros al comedor e inundar todo el espacio de luz natural. “Era una reforma mínima, pero estratégica”, explica Alicia Fuertes. “Queríamos que este espacio no solo fuese funcional, sino también social y acogedor”. Un banco de obra conecta comedor y cocina, y ofrece vistas directas al jardín: olivos, limoneros, y más allá, el Mediterráneo.




Junto al gran espacio donde conviven salón, cocina y comedor, las interioristas han diseñado una hermosa sala de lectura muy luminosa, que disfruta de vistas al jardín; un lugar envidiable de relax donde compartir también tertulias o momentos de recogimiento. Completa la planta un coqueto despacho y un aseo de cortesía.
Un refugio para el reposo
La planta primera incluye el dormitorio principal con cabecero en lino gris, lámpara escultórica de yeso blanco, alfombra patchwork en blanco, vestidor cerrado y vistas a la piscina, y el dormitorio de invitados en el que contrastan con elegancia: un banco de hierro, cuerda y piel negra, cabecero blanco roto, lámparas cerámicas envejecidas y una alfombra vintage en tonos azules. Ambos cuentan con visillos de lino 100%.
La planta inferior está dedicada al ocio y el bienestar, con gimnasio, sauna, cine, una bodega a medida, una segunda cocina, y dos dormitorios con gran capacidad de almacenaje.


El diálogo entre el interior y el exterior es continuo. Una pérgola construida a medida acoge la zona de barbacoas, junto a una gran mesa de madera de suar, una piscina de agua salada e iluminación exterior cálida y sobria.


Un refugio joven, funcional y con alma
Esta vivienda es un refugio que permite tanto la intimidad como el encuentro. “Estamos muy orgullosas del resultado”, afirma Sara Santamarta. “Cada rincón refleja el estilo de vida de sus propietarios. Es un hogar cálido y sofisticado que no necesitó grandes obras, solo un diseño bien pensado y una atención constante al detalle”.
El proyecto Altos Reales confirma la vocación de Fuertes Santamarta: proyectar sin estridencias, intervenir sin imponer, diseñar sin romper. La vivienda no parece haber sido decorada, sino más bien acompañada hasta lucir su mejor versión. Y en ese acompañamiento, cada elección —textil, textura, proporción— se convierte en un gesto de cuidado. Un proyecto que, como la luz que lo habita, fluye con naturalidad.


Proyecto: Altos Reales.
Ubicación: Sierra Blanca. Marbella (Málaga).
Interiorismo: Fuertes Santamarta. Alicia Fuertes y Sara Santamarta.
Terminado: 2024.
Superficie parcela: 1.030 m2.
Superficie construida: 362 m2.
Fotografía: Belén Imaz.

Fuertes Santamarta
En la confluencia sutil entre palabra y forma, entre sensibilidad y técnica, se desarrolla Fuertes Santamarta, un estudio de interiorismo que no se funda solamente sobre planos y materiales, sino sobre algo más intangible y, quizás por eso, más verdadero: la escucha. La escucha honesta de quienes habitan, sueñan y necesitan. La escucha como gesto inicial de una arquitectura emocional.
Este taller de interiorismo con sede en Marbella es el fruto de dos miradas complementarias. La de Alicia Fuertes, periodista y diseñadora de interiores, para quien cada casa es también una historia que merece contarse con belleza y pausa. Y la de Sara Santamarta, arquitecta y diseñadora, que comprende el espacio como estructura que acoge y transforma. Juntas, dirigen un estudio donde la empatía es materia prima, y el resultado siempre supera lo meramente funcional.
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Fuentes: Fuertes Santamarta y CTC Comunicación.
Fuertes Santamarta Interior Designers
Marbella (Málaga)
Alicia Fuertes: +34 654 424 350
Sara Santamarta: +34 658 602 565
hola@fuertessantamarta.com
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@fuertes.santamarta