Situado en la punta más extrema de la playa de Llafranc, este apartamento marinero de 80 m2 distribuidos en dos plantas, incluye un gran espacio salón comedor cocina, una suite, dos habitaciones y un baño. Aunque de uso vacacional se trata de un espacio de conexión especial con el mar en verano y recogimiento en invierno, un espacio que respira blanco y azul con toques marineros y luces tenues que ofrecen un ambiente agradable y sereno para disfrutar de la luz de la luna y la salida del sol.
Nos cuenta Rosa Colet “La primera vez que vi esta casa pensé que era un sueño. Su singularidad, su ventana redonda como ojo de buey mirando el mar, pedía respeto por los elementos originales y su conexión con el mediterráneo, una indiscutible mirada a los azules del mar, la espuma blanca, la arena tostada, la brisa.”
En su oficio de diseñadora experimentada de espacios, Rosa Colet siempre trabaja con una mirada puesta en el lugar donde está situado el espacio y otra en las personas que lo habitan, con su estilo de vida propio y diferente, consiguiendo urdir un hilo conductor que establezca una fuerte conexión entre ambos. Así lo ha hecho en esta vivienda.
El espacio que protagoniza la casa es el salón comedor cocina, un espacio abierto al mar a través de grandes ventanales, con sus acogedoras terrazas, espacios privilegiados para compartir y para meditar en soledad ante ese mediterráneo mágico.
La cocina, en península, en colores blancos y arena con sobre de silestone, conecta directamente con un amplio balcón lateral al que se accede tanto desde el interior de la casa como desde las escaleras de acceso, a través de una pasarela de madera de teka, para facilitar las reuniones habituales sin pasar por el interior.
En la terraza se ha instalado una chimenea de obra y un espacio de trabajo con cubeta de obra revestido con material continuo y frontal de puertas, con madera de maciza de teca, igual que la pasarela de acceso.
En la suite de la planta superior destaca su hermosa ventana circular que nos traslada a los interiores de los barcos. Para conseguir respetar esta ventana y poder ocultarla de noche, la interiorista creó un sistema que permite camuflar el cierre de la ventana, añadir una zona de asiento como velador debajo de ella y estantes retroiluminados a ambos lados.
El techo, de viguetas de madera con las lamas blancas a dos aguas, que continúa en el baño, colabora a crear un ambiente acogedor especial que completa un cabezal blanco con aplique ledtube de Marset y una lámpara en paja de Dareels.
Al fondo, y como antesala del baño, ocultándolo, un vestidor con puertas de madera en blanco y frontales semiacristalados recubiertos de malla de ratán, proyecta su luz interior produciendo un ambiente cálido.
En el baño, un sencillo banco de trabajo de madera, recuperado de un carpintero, hace de soporte para dos lavamanos con espejos circulares. La cerámica blanca en las paredes con suelo hidráulico en colores grises completan el espacio.
Rosa Colet
Cuenta con más de 30 años de trayectoria creando hermosos interiores. Está especializada en espacios hoteleros, restauración, oficinas y viviendas. En ellos el denominador común es la adaptación a las necesidades de cada proyecto, siempre con un enfoque estratégico desde el que crea y transforma los espacios.
Su manera de trabajar se centra en los objetivos de negocio de sus clientes. Diseña espacios con alma que comunican sensaciones y emociones. Ofrece resultados que actúan como agentes catalizadores de progreso: sea al mejorar el negocio de un hotel, al idear la experiencia completa de un restaurante o al convertir una vivienda en un hogar con alma.
Ha realizado proyectos muy variados en los que el usuario siempre está en el foco del diseño. Creando historias detrás de cada mueble, cada detalle, cada textura más allá de su estética. Para Rosa Cotet es tan importante el aspecto conceptual como el formal disfrutando de todo el proceso de diseño.
Entre sus proyectos de restauración destaca el nuevo modelo de restauración de Grandvalira en las pistas de esquí andorranas, un proyecto ambicioso que propone un nuevo concepto de restauración asociado al esquí: una experiencia gourmet en la que el idílico paisaje nevado, el interiorismo y la gastronomía se fusionan.
Fuente: Rosa Colet.
Rosa Colet
Carrer del Vallès, 31 bis
08320 El Masnou (Barcelona)
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